En el caso de los préstamos hipotecarios, la primera opción que la OCU sugiere es alargar el plazo, una medida que se ha generalizado bastante con la llegada de las entidades de crédito online. Tener más tiempo para devolver el capital prestado implica una disminución de las cuotas mensuales, lo que hará más fácil enfrentarse a ellas.
Es de destacar el bajo coste de este tipo de operación: unos 75 euros de gastos de notario y registro, y el cobro por parte del banco de una comisión por modificación de condiciones que no puede superar el 0,1% del capital pendiente. Hay que tener en cuenta que la ampliación es recomendable cuando el plazo pendiente no es muy largo, ya que cuanto mayor sea, menos se notará en la cuota el alargamiento. Aun así, no hay que olvidar que, al tardar más tiempo en saldar nuestra deuda, los intereses totales del préstamo serán mayores.